Cerca del 80 % de la población venezolana, no tienen acceso continuo a agua potable, por lo que su única opción es depender de un camión cisterna o de fuentes externas de agua que, muchas veces, se encuentran lejos del hogar
Deymer Abarrán/ Pasante UNICA/Caleidoscopio Humano
(04-07-2023) En la actualidad, podemos afirmar que el agua es el servicio básico más importante en la vida de las personas. Todos la necesitamos para lavar, cocinar, asearnos o simplemente para hidratarnos.
El acceso a agua potable es considerado un derecho humano básico, por lo cual, corresponde al Estado garantizar que todas las personas en Venezuela, cuenten con agua suficiente, saludable, aceptable, accesible y asequible; tal y como lo establece la Resolución 64/292 del 28 de julio de 2010 de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
A pesar de esto, son numerosas las zonas de Caracas donde la escasez de agua es cada vez más aguda. Esto afecta, de manera directa, la calidad de vida de los caraqueños.
Uno de los sectores afectados es Los Altos de Lídice. Esta zona se caracteriza por presentar un suministro de agua deficiente, con frecuentes interrupciones y limitaciones en su disponibilidad. Así lo confirman sus habitantes.
Rosa González es vecina del sector, asegura que el agua llega a su hogar una vez por semana, por lo que se ve obligada a utilizar recipientes como tobos y botellas para almacenar agua.
“Como nunca hay agua, no puedo hacer todo lo que debería, entonces debo esperar a ver qué día de la semana me llega el agua para aprovechar de lavar o limpiar. Para uno bañarse o cocinar, se las tiene que ingeniar porque tampoco podemos desperdiciar la poca agua que logramos recoger”, señaló.
González señaló que se ven en la necesidad de dejar los platos y ollas sin lavar durante varios días para poder utilizar esa agua en la cocción de los alimentos.
José Guzmán también es vecino del sector, a lo informado por Rosa, agregó que se limitan a no descargar el inodoro cada vez que lo usan, eligiendo hacerlo una vez al día o cada dos días.
Esta es una situación que puede generar enfermedades ante la proliferación de animales y malos olores.
Los vecinos del sector aseguraron que han enviado cartas a los distintos niveles del gobierno, solicitando mejoras en la distribución, ya que, “vivir sin agua casi toda la semana resulta insoportable”.
La falta de agua en el sector, ha provocado diversas protestas en la localidad, pero hasta el momento no han obtenido respuesta de las autoridades.
Es importante señalar que, la falta de agua potable, es una violación a los derechos humanos y que, a su vez, se vulneran otros derechos como la salud, la educación e, incluso, el derecho al trabajo de las personas que, por la escasez del líquido, ven limitadas sus jornadas laborales.
