Francisco González/Internacionalista/Líder emergente de MonitorDescaVe e Investigador de Caleidoscopio Humano
(30-07-2024) La trata de personas es un delito complejo y grave que involucra el tráfico de seres humanos, bajo amenaza o uso de la violencia, hacia fines relacionados con la explotación sexual, el trabajo forzado y diversas formas de esclavitud.
En el derecho internacional, el delito de la trata de personas se encuentra tipificado en el protocolo para prevenir, reprimir y sancionar la trata de personas, especialmente mujeres y niños, que complementa la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional.
Aunque cualquier persona puede ser víctima de trata, las mujeres, niñas, niños, adolescentes y migrantes son las víctimas más vulnerables.
Las mujeres y niñas suelen ser víctimas de trata con fines de explotación sexual, con frecuencia vinculadas con redes internacionales de prostitución, que las raptan de sus países de origen para ser explotadas sexualmente en otras naciones.
Los niños y los migrantes, aunque también víctimas de trata con fines de explotación sexual, suelen ser víctimas de trata para que realicen trabajos forzados, como servidumbre doméstica y explotación de minas.
Las crisis políticas, económicas y sociales, como la que vive Venezuela, son tierra fértil para las bandas que se dedican a la trata de personas.
Ello explica por qué en Latinoamérica, los mayores índices de este delito los presentan Venezuela, Cuba y Nicaragua.
En el caso venezolano, la Emergencia Humanitaria Compleja que aqueja al país desde hace casi una década no solo ha empujado a más de siete millones de personas al exilio, sino que, además, ha hundido en la pobreza al 80 % de la población que queda en el país.
En ese contexto, millones de niños, niñas y adolescentes dejados solos y/o al cuidado de terceros son blancos fáciles para redes de trata, que les secuestran para alguno de los fines antes mencionados.
Según datos de Mulier Venezuela, una ONG que ha estudiado la trata de personas en el país, desde el 2021, al menos 1800 venezolanas han sido rescatadas de redes de trata, un número muy superior a las 55 víctimas que el ministro de Interior y Justicia, Remigio Ceballos, afirmó haber rescatado.
Adicionalmente, se desconoce el número real de víctimas de trata en Venezuela, y de venezolanos fuera del país. Los países con mayor presencia de personas de Venezuela traficadas y en condición de esclavitud coinciden con los países que mayor cantidad de venezolanos han recibido, con lo que Colombia y Perú lideran las listas.
Se han documentado casos donde a jóvenes venezolanas se les ofrecen -vía redes sociales- ofertas de trabajo como promotoras o vendedoras y, al ser llevadas al país de destino, son sometidas a tener relaciones sexuales con un mínimo promedio de tres hombres al día, para poder pagar la cuota al proxeneta de turno.
De no cumplir puntualmente con los pagos de las cuotas, las víctimas son sometidas a castigos físicos, sexuales y psicológicos.
En definitiva, la trata de personas debe ser combatida de manera activa y consistente por las autoridades venezolanas y, además, la emergencia debe atenderse de inmediato para disminuir el número de potenciales víctimas de este delito.