Liceo Estadal Arquitecto Claudio Corredor Müller, de El Vigía, estado Mérida,

Estudiantes de liceo de Mérida protestaron ante la falta de docentes

Entre 2018 y 2021, más de 166.000 maestros abandonaron su profesión para dedicarse a otras actividades o migrar

Emmanuel Rivas

(07-11-2023) La Emergencia Humanitaria Compleja que, desde 2015, afecta Venezuela, ha llevado a que el sistema educativo pierda a la gran mayoría de docentes y especialistas, dejando a millones de niños, niñas y adolescentes, sin garantías para su formación académica.

Solo entre 2018 y 2021, más de 166 mil docentes abandonaron las aulas de clases para dedicarse a otras actividades distintas a su profesión, pero que resultan mucho más rentables y lucrativas para cubrir sus necesidades básicas.

Esta situación de crisis generalizada del sistema educativo, llevó a que, de acuerdo con la Federación Venezolana de Maestros (FVM), se registraran 3185 protestas de docentes en todo el país durante el período escolar 2022-2023.

La falta de docentes es justamente lo que llevó a los estudiantes de 5to año del Liceo Estadal Arquitecto Claudio Corredor Müller, de El Vigía, estado Mérida, a manifestarse desde el pasado 06 de noviembre, en un intento por ser escuchados por las autoridades con competencia educativa en el estado andino.

Con megáfono en mano, los jóvenes denunciaron «para nadie es un secreto que en este liceo no contamos con los docentes como debe ser (…) protestamos por una educación de calidad. ¿Cómo es posible que a cuarto y quinto año les falten más de docentes de -al menos- cinco materias?»

Misma situación que viven los estudiantes de segundo año de bachillerato, aseguraron.

Los jóvenes que tuvieron la iniciativa de levantar su voz de protesta para exigir garantías a su derecho a la educación, no permitieron que los demás estudiantes ingresaran a las aulas de clases, como una medida de presión para exigir la presencia del gobernador o de algún ente vinculado con el sector educativo que pudiera darles alguna solución a sus exigencias.

«Nosotros merecemos educación de calidad. Estamos aquí para estudiar, para aprender, no para venir a perder el tiempo (…) nos merecemos por lo menos cuatro clases al día, y estamos teniendo una o si acaso dos. No puede ser posible», enfatizó una joven estudiante en un video que se promovió a través de las redes sociales.

Se pudo conocer que la gobernación del estado dio respuesta a la demanda de los estudiantes e inició un proceso de contratación para completar la matrícula docente de la institución educativa.

A pesar de esto, es importante recordar que en el país, los bajos sueldos con los que cuentan los docentes, los ha llevado a migrar o a dejar su profesión para dedicarse al comercio informal o a otras labores que les permita incrementar sus ingresos.

Muchos de estos docentes son de áreas como Matemáticas, Química, Física o Biología, además de Castellano e inglés.

Las malas condiciones laborales, que incluyen la falta de suministros y recursos en las escuelas, la falta de infraestructura adecuada y la inseguridad en algunos planteles, también han contribuido a la deserción de docentes venezolanos.

Esta es una realidad a la que el Estado se niega a darle respuesta y que, por tratarse de un derecho humano universal, su falta de garantía, promueve la pobreza y profundiza las desigualdades.

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