Los venezolanos están preocupados por los posibles efectos que puede tener la falta de operatividad en el gran complejo, que genera más de 80% del gas que se usa en el consumo interno del país
(22-11-2024) A pasado más de una semana desde la explosión en el Complejo Gasífero Muscar de Pdvsa, en el estado Monagas. Mientras que el gobierno nacional culpa a la oposición por un presunto ataque terrorista en la planta, los venezolanos están preocupados por los posibles efectos que puede tener la falta de operatividad en el gran complejo, que genera más de 80% del gas que se usa en el consumo interno del país. Al pasar de los días, algunos estados ya muestran signos de escasez de gas doméstico y vehícular, mientras que la crisis eléctrica provoca estragos en entidades como Nueva Esparta, Sucre y Anzoátegui.
La explosión ocurrió el pasado lunes 11 de noviembre pasadas las 10:00 am. De acuerdo con la información oficial, al menos cinco trabajadores resultaron heridos y poblaciones cercanas al complejo fueron evacuadas.
La vicepresidenta ejecutiva y ministra de Petróleo del gobierno de Nicolás Maduro, Delcy Rodríguez, atribuyó el accidente a un ataque terrorista en el que involucró al estadounidense Erik Prince y a la líder opositora María Corina Machado, sin embargo, no dio detalles sobre el alcance de los daños o tiempo estimado de reparación.
¿Cuál es el alcance de los daños tras la explosión en complejo de Pdvsa en Monagas?
Un informe de la empresa estatal Pdvsa al que tuvo acceso a la firma SyP Global reveló que el incidente ocurrido en la planta de Monagas provocará retrasos en la producción de petróleo liviano, pesado y de gas natural hasta al menos febrero de 2025.
«Este accidente ha sido calificado como ‘catastrófico’, porque destruyó la infraestructura estratégica de producción de gas y petróleo de Pdvsa», dijo un funcionario de la estatal a esta firma especializada, quien por razones de seguridad mantuvo su nombre en anonimato.
Esta misma fuente indicó que a simple vista se observan daños considerables en el colector de gas, aunque no se descartan daños ocultos. «Muy cerca del colector se encuentra la planta compresora Muscar, que probablemente sufrió algunos daños a causa del incendio y la expansión de la explosión», agregó.
El funcionario de Pdvsa añadió que “hay que hacer mucho trabajo de reconstrucción de gasoductos nuevos. Se dañó una red importante de gasoductos, hay daños en la electrónica, en la instrumentación que acompaña esa operación, puede haber daños ocultos, hay que revisar todo lo que está alrededor de esa instalación que explotó”.
Como consecuencia de esta falta de gas, según el informe preliminar, se encuentran fuera de servicio las centrales eléctricas a gas de los estados Anzoátegui, Sucre y Nueva Esparta; el Complejo Petroquímico Jose; las plantas petroquímicas Metor I, Metor II y Fertinitro; las plantas de fraccionamiento y extracción de líquidos asociadas al complejo Muscar, como San Joaquín y Santa Bárbara. También se encuentra paralizado el suministro de gas a las empresas básicas de Guayana.
Esta es la razón por la que el estado Nueva Esparta vive una crisis eléctrica desde el 12 de noviembre con apagones que duran hasta 20 horas, mientras que en Monagas racionan la electricidad desde el pasado viernes 15 de noviembre en bloques que van de 3 a hasta 5 horas.
«El gran problema es que se destruyó el múltiple y se afectó el tubo troncal de transmisión de gas Muscar – Anaco. Sin esa infraestructura no hay forma de enviar gas hacia el hub de distribución nacional», advirtió el economista venezolano Federico Alves en una publicación en redes sociales.
Destacó que la situación es muy complicada porque no hay posibilidad de sustituir el volumen de gas aportado por el tubo afectado.
Alves explicó que la antigua fuente de reemplazo eran los campos de gas libre de Anaco, que en algún momento tenían produción 1800 millones de pies cúbicos estándar de gas por día, suficiente para satisfacer la demanda nacional, pero actualmente producen escasamente 300 MMft³ por día.
«Reparar el tubo fallado, trabajando en emergencia, toma su tiempo. Es infraestructura mayor, tuberías de alto espesor y todo lo que implica en cuanto a control (válvulas, instrumentación, etc.). Otro punto, el cual se desconoce su real estatus, es la compresión requerida para transportar el gas. Allí se trata de equipamiento de alta presión y muy altos volúmenes. Esos no son equipos que se compran en la esquina. De manera que al mirar el panorama, la situación es bien complicada», indicó.
El economista dijo que la situación afecta directamente la producción de gas licuado del petróleo, pues la planta de Sta Bárbara y de San Joaquín están impactadas en su operatividad al no recibir suficiente gas rico.
«Sin ese aporte, no existe la extracción de líquidos y por consiguiente, el fraccionador de José no recibe suficientes líquidos del gas natural que son la materia prima para producir GLP (propano, butano, Isobutano). Eso afecta seriamente el volumen de GLP disponible para el mercado y en consecuencia, el número de cilindros de gas que puede recibir el ciudadano para cocinar«, concluyó.
Reportan escasez de gas vehícular en Lara
El Órgano Superior de Transporte del estado Lara confirmó el martes 19 de noviembre que la entidad enfrenta una contingencia por la escasez de Gas Natural Vehicular (GNV), combustible del que depende 80% del transporte público.
El coordinador David Sun informó, en declaraciones para El Pitazo, que de las nueve estaciones de servicio destinadas al GNV en la entidad, solo funcionaban en ese momento La Pastora y La Sindical, ubicadas entre el centro y el oeste de Barquisimeto.
Explicó que cada bomba puede atender hasta 200 vehículos al día, mientras que el parque automotor de transporte público en Lara abarca, aproximadamente, 3.800 unidades.
Según datos del Sindicato Nacional de Trabajadores del Transporte en Venezuela (Sintratransve), 80% de estos vehículos ha migrado al GNV por los altos costos del diésel y la gasolina, lo que agrava las dificultades de movilidad para los ciudadanos.
El funcionario dijo que desconocía la razón de la escasez, pero la información que le han dicho hasta el momento es que no hay suficiente presión.
Aunque el gas que surte a Lara proviene de Puerto Cabello y, en teoría, no debería verse afectado por el hecho ocurrido en Monagas, el ingeniero Orlando Díaz, quien participó en remodelaciones de estaciones de GNV en el oriente del país, sugiere que Pdvsa podría haber reducido la presión en la línea de suministro nacional como medida preventiva.
Escasez de gas provoca grave crisis eléctrica en Nueva Esparta y otros estados
La Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) ha estado aplicando prolongados racionamientos eléctricos en varios estados de Venezuela por la escasez de gas para producir energía térmica.
El ingeniero José Aguilar, especialista en sistemas de generación eléctrica, explicó a El Pitazo que al no haber suficiente combustible para las termoeléctricas, el país depende aún más de la energía que se produce en la Central Hidroeléctrica Simón Bolívar, conocida como Guri, que resulta insuficiente por las limitaciones que tiene la red de transmisión.
“Si no tienen gas suficiente, ellos pueden tratar de suplir ese déficit con más hidroelectricidad. Sin embargo, dado el mal estado en que se encuentra la red y a pesar de tener suficiente hidroelectricidad, no se puede equilibrar el sistema y se presta para una situación más inestable”, explicó.
Además de Nueva Esparta, donde los apagones son de hasta 20 horas, en Zulia ya se reportan cortes eléctricos de hasta cuatro horas diarias, en Táchira de entre cinco a 10 horas por día, y en Lara de cuatro a seis horas.
En cuanto a la región insular, es la más afectada porque se alimenta en gran medida de la termoeléctrica Juan Bautista Arismendi, donde la escasez de gas es mayor.
El experto señaló que la isla de Margarita cuenta con un solo cable sublacustre, que permite importar no más de 150 megavatios de energía —60% de la demanda del estado— producida en Guri.