13/05/2023. El Universal
Desde 2020 hasta marzo de este año, se expulsaron 2,8 millones de personas bajo el Título 42
Caracas. – Desde este viernes a las 12:00 am, según el horario de la costa este de EEUU, el controvertido Título 42, que permitía la expulsión expedita de personas de Estados Unidos hacia México con la justificación de la pandemia de Covid-19, dejó de estar en vigor.
Esta medida fue implementada durante la administración de Donald Trump y con ello los migrantes que cruzaron de manera ilegal eran expulsados rápidamente a sus países de origen o a México. Desde 2020 hasta marzo de este año, se expulsaron 2,8 millones de personas bajo el Título 42, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP, por sus siglas en inglés).
Ante la expiración de la normativa, miles de migrantes de distintas nacionalidades se han acercado a la frontera sur de EEUU con la esperanza de entrar en el país norteamericano. Entretanto, se reforzó la presencia de agentes fronterizos para controlar o impedir su avance.
El jefe de la Patrulla Fronteriza del país (USBP, en inglés), Raul Ortiz, estima que «más de 60.000 inmigrantes» se están concentrando en la frontera y sus alrededores, según declaró al canal CBS. «Por eso nos centramos en asegurarnos que hacemos todo lo posible por asignar recursos para abordar esos flujos», remarcó.
Horas antes de vencer oficialmente el Título 42, un juez federal del estado de Florida emitió un dictamen que impide a la Administración del presidente Joe Biden aplicar una política que permita la entrada de migrantes sin cita judicial o la posibilidad de rastrearlos. La orden judicial estará vigente durante dos semanas.
Se trata de la política denominada oficialmente ‘libertad bajo palabra’, bajo la que los migrantes debían concertar una cita con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas o solicitar un aviso de comparecencia por correo.
Desde el Departamento de Seguridad Nacional advertían que el bloqueo del uso de esta práctica podría traer consigo el caos en la frontera. Según sus estimaciones, unos 45.000 migrantes podrían estar bajo custodia a finales de mayo, pero el juez consideró estos argumentos como no concluyentes, señala Fox News.
Los campamentos, con carpas improvisadas, han ido creciendo desde el pasado fin de semana. Hay migrantes tanto de países latinoamericanos, como de otras partes del mundo, reseña The San Diego Union-Tribune.
En Tijuana, ciudad del estado mexicano de Baja California, en la frontera con EEUU, el número de migrantes se ha incrementado en hasta un 50 % esta semana, dijo Enrique Lucero Vázquez, titular de la Dirección Municipal de Atención al Migrante (DMAM), citado por El Sol de Tijuana.
El funcionario comentó que actualmente la red de 31 albergues que hay en la ciudad está al máximo de su capacidad.
Además de Baja California, también hay un número inusual de migrantes en las fronteras que comparten los estados mexicanos de Chihuahua y Tamaulipas con EEUU.
«El levantamiento de la orden en virtud del Título 42 no implica que la frontera esté abierta», dice un texto del Departamento de Estado y el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), publicado a finales de abril.
Una vez finalizado el Título 42, detallan, EEUU volverá a usar las facultades migratorias establecidas en el Título 8 «para procesar de manera expeditiva y expulsar a personas que lleguen a la frontera estadounidense de forma ilegal».
De acuerdo con las autoridades, las personas que crucen ilegalmente hacia EEUU. podrían ser expulsadas «en cuestión de días»; asimismo, «quedarán imposibilitadas de volver a ingresar» al país por al menos cinco años si se ordena su expulsión; y «se supondrá que no son elegibles para pedir asilo», cuando no medie una excepción aplicable.
EEUU anunció unas nuevas medidas para conseguir una migración regular, ordenada y segura, que contará con la colaboración de Guatemala, Colombia, México, Canadá y España.
En Guatemala y Colombia, por ejemplo, comenzarán a operar los Centros Regionales de Procesamiento (RPC, por sus siglas en inglés), lugares para tramitar solicitudes de asilo, permisos laborales y de reagrupación familiar. De acuerdo con el Departamento de Estado, esos sitios ayudarán a «reducir la migración irregular y facilitar vías seguras, ordenadas, humanas y legales».