Oncológicos

Denuncian abandono total del Servicio Autónomo de Oncología de Lara

El Servicio Autónomo de Oncología fue creado hace 15 años con la visión de ser un centro piloto de primera línea para atender a pacientes con cáncer, sobre todo los de bajo recursos económicos pero a través de los años fue disminuyendo su eficiencia hasta encontrarse prácticamente cerrado. Pacientes y familiares afirman que las autoridades sanitarias han hecho poco para su recuperación

Crónica Uno

(09-07-2022) El Servicio Autónomo de Oncología, SAO, creado en el año 2007 con tecnología de última generación, lamentablemente hoy es un ejemplo claro y visible de la desidia, desinversión, mala gerencia, corrupción y falta de humanidad por parte de las autoridades regionales de salud en el estado Lara, así lo denunció Alberto Domínguez, dirigente sindical del sector salud en Lara.

Este importante centro asistencial, a pesar de encontrarse dentro de las instalaciones del Hospital Central Antonio María Pineda de Barquisimeto, era autónomo hasta el año 2017, cuando fue intervenido por el gobierno regional y su nómina pasó a formar parte del primer centro asistencial de Barquisimeto, el 5 de abril del 2018.

En el mismo se atendían alrededor de 145 pacientes diarios y a cada uno se les suministraba gratuitamente el tratamiento, según cada patología y requerimientos como endovenoso, oral o sucesivos; fueron muchos los pacientes que lograron vencer el cáncer y otros, pudieron ganarle años a la vida.

Sin embargo, la realidad de hoy en día es muy diferente. Pacientes, familiares y algunos de los pocos trabajadores que quedan en SAO, contaron que actualmente acuden por cita menos de 12 personas, solo los días jueves por la tarde y son atendidos por una especialista que prácticamente hace su trabajo como voluntaria.

Domínguez cuenta que el 22 de febrero de 2019, el doctor Javier Cabrera, actual Secretario de Salud del estado Lara, anunció que el Ministerio de Salud había aprobado los recursos para la recuperación de este centro médico, pero los trabajadores que quedan allí afirman que nada ha llegado e incluso, todo ha ido deteriorándose o perdiéndose.

«La planta eléctrica está desvalijada, los dos aceleradores están inoperativos, el ascensor está dañado, el almacén fue desvalijado, el tomógrafo está inoperativo, el aire acondicionado no funciona y los pacientes deben llevar ventiladores, el sótano está inundado de aguas servidas, hay filtraciones» señaló el denunciante.

Tuvo servicios de quimioterapia, radioterapia, braquiterapia, laboratorio, psicólogos, nutricionistas, 4 oncólogos, 6 técnicos de radioterapia, 3 médicos físicos, almacenistas y bioanalistas, Domínguez se preguntó: ¿Dónde está todo?.

El sindicalista contabilizó al menos 80 trabajadores hasta el 2018 y actualmente, quedan menos de 25 personas que aún trabajan en este desolado lugar que poco a poco se ha ido perdiendo.

«Señor gobernador, con todo respeto, ahí están las fotos tomadas esta misma semana, este es el verdadero 1 por 10 que ustedes están solicitando y que nosotros tenemos años entregando a la Contraloría, Defensoría, Fiscalía, Gobernación y nada que resuelven esta grave crisis» añadió.

Asimismo, insistió en el llamado al gobernador de Lara para que investigue y realice una auditoría a la gestión del doctor Javier Cabrera, autoridad única de salud regional «y estamos seguros que le sobrarán motivos para tomar la inmediata decisión de remover a estas autoridades».

Con este llamado que realizan tanto el dirigente sindical, trabajadores y familiares de los pacientes, esperan que las autoridades regionales no vayan a arremeter en su contra, ya que lo que buscan es una solución a esta situación por lo impagable que se volvió esta enfermedad y su tratamiento.

Finalmente, Domínguez invitó a las autoridades con competencia, para que visiten este centro oncológico y desmientan o corroboren la denuncia de los afectados.

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