La nutricionista Susana Raffalli señaló que la desnutrición aguda bajó pero siguen presentándose casos de niños con retraso en su desarrollo
(08-10-2022) Susana Raffalli, nutricionista especializada en gestión de la seguridad alimentaria, en emergencias humanitarias y riesgo de desastres, expresó durante el foro “¿Es necesaria hoy la acción humanitaria en Venezuela?”, organizado por Laboratorio de Paz, Prepara Familia, Provea, Civilis, Convite y Laboratorio de Paz, que el retardo de crecimiento en los niños de 0 a 5 años aumentó de 11 % a 35 % en el último año.
“La desnutrición aguda bajó, pero los niños (de 0 a 5 años) con retardo de crecimiento subieron de 11 % a 35 % en todo el país. Eso es brutal. 35 % de los niños con retardo de crecimiento es brutal”, subraya Susana Raffalli durante el foro realizado el 19 de agosto.
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La mala alimentación de las madres durante el embarazo y la lactancia es uno de los factores que influyen en el lento desarrollo de los infantes.
Ante este panorama, revela que, a pesar que la situación ha mejorado para algunos, en los sectores más pobres de Venezuela la realidad se ha tornado aún más difícil.
Medidas como vender todas las propiedades o bienes, recurrir a actividades informales, separarse como familia antes de colapsar o migrar toda junta, son las que han tomado los venezolanos para intentar salir de la crisis humanitaria que padecen, según la nutricionista.
Raffalli destacó que la desnutrición aguda bajó, pero siguen presentándose casos de niños con retraso en su desarrollo.
“Eso es brutal. 35 % de los niños con retardo de crecimiento es brutal. Es una cosa sumamente preocupante. Estamos segundos después de Guatemala, y Guatemala es el cuarto del mundo. Venezuela, con los recursos que tiene, se ha permitido hipotecar el capital humano de esta manera”, subrayó.
Agregó que la falta de proteínas y de hierro genera retraso en el crecimiento de los niños.
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Según la organización no gubernamental Cáritas, esto se debe a la desnutrición crónica que se ha venido arrastrando con los años.
Pobreza extrema
En un trabajo del portal Acción Solidaria, Gloria Perdomo, coordinadora nacional del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), explicó que las condiciones básicas para vivir se ven vulneradas en los estratos más bajos del país, la dificultad para acceder a los alimentos necesarios ocasiona el retraso del desarrollo en los menores aunado a las fallas en los centros de salud.
Por su parte, el pediatra Huniades Urbina-Medina, secretario general de la Academia Nacional de Medicina (ANM), indicó que la desnutrición subió de 20 % en 2021 a 33% en lo que va de 2022, y según parámetros de la Organización Mundial de la Salud (OMS), un 10% de la población infantil con desnutrición ya califica como una situación de alarma para cualquier nación.
El informe más reciente de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) evidenció que al menos 3.200 niños menores de 5 años tienen desnutrición aguda.
Casos de desnutrición
Acción Solidaria recoge una serie de casos ocurridos en distintos estados de Venezuela, que reflejan la crisis que enfrentan los niños con mala alimentación.
En Anzoátegui, un bebé de 1 año fue hospitalizado por desnutrición en varias oportunidades en el Hospital Universitario Dr. Luis Razetti, pesaba solo 4,5 kilogramos. La última vez que visitó el nosocomio, el desenlace fue fatal.
En Monagas, se registraron 10 muertes de niños por este padecimiento tan solo hasta el mes de marzo.
En Bolívar, para los pueblos indígenas la realidad no es distinta. La comunidad Warao ha registrado varias muertes infantiles por desnutrición.
Mala alimentación durante el embarazo
Es durante la etapa de gestación que las madres deben proveer al bebé los nutrientes necesarios para su correcto desarrollo, pero al ser Venezuela el país que ocupa el tercer lugar con mayor tasa de embarazos en adolescentes de América Latina, al menos 20 % de los casos corresponden a madres jóvenes con déficit nutricional, según Maritza Landaeta, coordinadora de investigación y docencia de la Fundación Bengoa.
Transparencia Venezuela también se refirió a este flagelo indicando en su portal que el país es el tercero con la mayor inflación alimentaria, de acuerdo al más reciente informe publicado por el Banco Mundial, lo que significa que los indicadores de pobreza y acceso a los servicios esenciales son desalentadores.
Susana Raffalli ha dejado claro, en distintas oportunidades, que el consumo de proteínas cayó un 80 %. Siendo la carne roja una de las más importantes fuentes de hierro, y de las más inaccesibles para un gran porcentaje de venezolanos, explicaría los elevados niveles de anemia registrados en mujeres y niños.
“Estas cifras reflejan la situación de las poblaciones más pobres del país, porque es ahí donde está el trabajo humanitario que hay que hacer, no estamos reflejando la situación en la zona rosa de Caracas”, dijo Raffalli en el conversatorio.
