La mayoría de las muertes maternas son evitables si se desarrollan políticas sanitarias orientadas a prevenir o tratar las complicaciones antes, durante y después del parto
Por María Alejandra Silva/Caleidoscopio Humano
(08-05-2022) Dar a luz en cualquier parte del mundo puede significar alegría y gozo. Sin embargo, vivir este proceso en Venezuela, un país que atraviesa una Emergencia Humanitaria Compleja (EHC), genera preocupación, ansiedad y hasta la muerte.
Una encuesta realizada en 2019 por HumVenezuela, plataforma independiente que documenta la EHC en el país, reveló que, en cuatro de cada 10 hospitales escasean los insumos básicos y en ocho de 10 faltaban insumos quirúrgicos y reactivos.
Mientras que, para el mismo año la mitad de las maternidades venezolanas tenían sus servicios de obstetricia inoperantes o cerrados de forma parcial o total.
Este mismo estudio detalló que el 57 % de las embarazadas recibió una atención obstétrica inadecuada en centros maternos públicos del país.
Mortalidad materna en aumento
La tasa de mortalidad materna es el número de mujeres que mueren por causas relacionadas al embarazo, durante el periodo de gestación o dentro de los 42 días posteriores a la culminación del embarazo por cada 100.000 nacimientos.
El Centro de Salud Humanitaria del Johns Hopkins preparó un perfil de la salud de Venezuela para la Organización Simón Bolívar. El estudio fue presentado el 24 de marzo de 2022.
La investigación mostró que en el año 2000, Venezuela registró 119 muertes maternas por cada 1000 nacimientos. Para 2017, la cifra aumentó a 125 muertes.
El aumento de 5 % de la mortalidad materna en Venezuela entre 2000 y 2017 es lo opuesto a la tendencia mundial, que vio una disminución de 38 % en el mismo período de tiempo, de acuerdo con la investigación.
Según el estudio, entre 2012 y 2016, las muertes maternas se duplicaron de 370 a 756 a nivel nacional.
En el caso de los neonatos, la cifra aumentó de 10.9 fallecimientos por cada 1000 nacimientos a 14.6 muertes por cada 1000. Las principales causas de muerte neonatal son: prematuridad, anomalías congénitas, sepsis y complicaciones del parto.
Los datos oficiales de mortalidad no han sido publicados desde 2013, con la excepción del breve comunicado de los datos de 2016 en 2017.
Alarma y aviso de la Organización Mundial de la Salud (OMS)
El aumento de la mortalidad materna es preocupante, pues refleja, no solo los factores de riesgo biológico inherentes a cada mujer, tales como edad, antecedentes personales, familiares, patologías desarrolladas durante el embarazo, sino, más importante aún, la vulnerabilidad que es la condición que se genera por ausencia de factores sanitarios protectores.
La mayoría de las muertes maternas son evitables. Las soluciones sanitarias para prevenir o tratar las complicaciones son bien conocidas y están resumidas por la Organización Mundial de la Salud (OMS):
Todas las mujeres necesitan acceso a la atención prenatal durante la gestación, a la atención especializada durante el parto y, a la atención y apoyo en las primeras semanas tras el parto.
La salud materna y neonatal están estrechamente relacionadas.
Es importante que todos los partos sean atendidos por profesionales sanitarios capacitados, dado que la atención y el tratamiento a tiempo pueden suponer para la mujer y el niño la diferencia entre la vida y la muerte.
El Estado venezolano debe asumir su responsabilidad en la vida de las mujeres embarazadas en el contexto de la Emergencia Humanitaria Compleja que atraviesa el país habilitando mejores salas de partos en instituciones públicas, incrementando los salarios del personal de salud y procurando el equipamiento adecuado para así reducir la mortalidad materna y de neonatos.
Diversas ONG han exigido al Estado que debe garantizar, además, una educación sexual adecuada y anticonceptivos gratuitos que permitan a las mujeres una planificación materna adecuada y sin riesgos para su vida.