Desde grandes tiendas hasta vendedores ambulantes de frutas, jabones o chucherías, a la dolarización de precios no hay quien la detenga. Comerciantes aseguran que son contados los clientes que preguntan por precios en bolívares y los productos que aún se exhiben en moneda nacional.
De no ser por una noticia que leyó Jimena Álvarez en Instagram la mañana de este martes, en su local “ninguno se habría enterado de lo de poner dos precios”. Desde que Venezuela entró en hiperinflación, a finales de 2017, tienen un pendón donde pueden borrar y escribir los precios conforme van aumentando, por lo que bastó simplemente con añadir el nuevo monto a un costado.
Desde este 1° de septiembre, según lo establecido por el Banco Central de Venezuela (BCV), los precios en bolívares de bienes y servicios deben estar expresados tanto en la escala actual (vigente desde agosto de 2018) como en la de la reconversión monetaria que entrará en vigencia el 1° de octubre y le quitará seis ceros al bolívar.
Aunque, a diferencia de las reconversiones de 2008 y 2018, esta llega en un momento en el que son pocos los precios que, a vista del público, se manejan en bolívares. “Aquí los bolívares los manejamos a lo interno, cuando se calculan impuestos, se paga una parte de los salarios y, por supuesto, al cliente pagar en bolívares y generar la factura”, cuenta Jimena, encargada de un abasto familiar en Catia.
En 2019, luego de que el Gobierno relajara los controles a la economía, entre ellos el de cambio, la hiperinflación impulsó un proceso de dolarización informal que ha aumentado conforme pasan los años. Según cálculos de la firma Ecoanalítica, actualmente en el país entre 65 % y 70 % de las transacciones comerciales son en divisas, lo que deja al bolívar para pagos puntuales o para completar centavos.
«Ya ni siquiera la gente que va a comprar pregunta por precios en bolívares, todo se calcula en divisas. Aquí muy pocos productos los ponemos en bolívares, más que todo las verduras, hortalizas o la caja de cigarros, que se factura en bolívares y puede llegar a mayor o menor precio, todo depende”, dijo a Crónica.Uno Gian Celis, comerciante de El Valle.
En el mercado municipal de Quinta Crespo, por su parte, la medida fue acatada por el grueso de los negocios. A pesar de lo avanzado del proceso de dolarización informal en el país, en ese establecimiento las carnicerías no han dejado de reflejar sus precios en bolívares pues, aseguran los comerciantes, las autoridades así lo exigen.
Misma situación aplica para charcuterías, verdulerías y fruterías del recinto, aunque con el pasar de los meses se ha vuelto inevitable dejar a un lado la moneda nacional en los carteles. “Ya la gente misma lo pide porque a veces llegan con 10 o 20 dólares exactos y es más fácil para ellos calcular”, dijo un vendedor consultado.
Aunque la doble expresión de precios (o triple, en el caso de carteles que incluyen precios en dólares) llegó a confundir a más de uno. “Me sorprendí cuando vi que el precio del pernil decía: 18,90”, exclamó una señora luego de que el vendedor le aclarara que ese era el precio en “bolívares digitales”, pues en dólares el monto es de $4,6.
“Mentalmente, todos estamos utilizando como valor referencial el dólar. Uno va a cualquier mostrador o establecimiento y, cuando se expresa el valor en bolívares, inmediatamente el consumidor reacciona y dice: ‘no, lo quiero en dólares’. Es el mercado el que va a terminar decidiendo cuál valor se usa, son los consumidores los que toman esa decisión”, dijo la presidente de Consecomercio, Tiziana Polesel, en entrevista con Unión Radio.
Y, en efecto, en un recorrido hecho por Crónica.Uno en varios puntos de la ciudad se evidenció que, desde grandes tiendas hasta vendedores ambulantes de frutas, jabones o chucherías, a la dolarización de precios no hay quien la detenga.
«Aquí ponemos un cartel de tres pares de zapatos por 120 millones de bolívares y nadie entra, y yo dudo que eso vaya a cambiar con los seis ceros menos”, señaló Sarahy, vendedora de una tienda del centro comercial El Valle.
En cuanto a cadenas de supermercados y farmacias, de las visitadas solo Farmatodo ya muestra la doble expresión de precios, incluso en su página web. Locatel, si bien no tiene precios en dólares, aún mantienen la expresión actual, mientras que en Farmahorro la referencia es la moneda estadounidense.
En las cadenas Fórum, Plaza, Gama y Día Día, así como pequeños supermercados de zonas populares, los precios siguen estando marcados exclusivamente en dólares, tanto en anaqueles como en redes sociales, donde también suelen publicar ofertas de ciertos productos.