Se dijo que la queja reiterada de los gobiernos locales es que están solos y aún con las limitaciones de recursos, han atendido oportunamente las necesidades más apremiantes que la crisis migratoria exige
La legisladora federal Janneth Moreno Argüelles (PRI), aseguró que la migración masiva hacia México ha evidenciado la falta de coordinación intergubernamental, lo que ha provocado una grave crisis operativa y logística, que deriva en violaciones constantes de los derechos humanos de las personas migrantes.
A nombre su grupo parlamentario, expuso que por esta razón, solicitaron mediante un Punto de Acuerdo, que la Cámara de Diputados, se exhorte a las secretarías de Gobernación y Relaciones Exteriores, así como a los delegados federales en los estados fronterizos, a reforzar los programas de atención y cuidado de migrantes.
Exigió al Gobierno federal a fortalecer la protección de la población migrante, refugiada y los mexicanos de retorno, muchos de ellos, a raíz del incremento en las deportaciones por parte de las autoridades estadounidenses.
Moreno Argüelles explicó coordinación con las autoridades estatales para resolver la crisis operativa, de infraestructura y salud pública por la que atraviesan los municipios de Tijuana, Mexicali, Matamoros y Ciudad Juárez, donde se concentra el mayor flujo por la aprehensión y deportación de inmigrantes.
Asimismo, pidió a la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados autorice enviar a un grupo de legisladores, integrantes de las comisiones de Asuntos Migratorios y de Asuntos Frontera Norte, para que visiten y recaben un diagnóstico puntual de la problemática que se vive en el campamento migrante en las inmediaciones de la Garita Fronteriza “El Chaparral”, Tijuana-San Diego.
Dicho campamento, abundó, está conformado por 476 carpas y cerca de mil 500 personas de distintas nacionalidades, de las cuales 40% son niñas, niños y adolescentes, y “donde se ha reportado, una grave crisis migratoria que requiere atención inmediata de las autoridades federales”.
Agregó que la queja reiterada de los gobiernos locales es que están solos y aún con las limitaciones de recursos, han atendido oportunamente las necesidades más apremiantes que la crisis migratoria exige; sin embargo, se requiere la participación de las autoridades federales para hacer frente a los compromisos que conlleva resguardar los derechos humanos.