El periodista merideño es productor y conductor del programa “Limite Cero”, un espacio televisivo y radial que educa sobre las diferentes discapacidades y de cómo lograr una inclusión no forzada
Emmanuel Rivas/Caleidoscopio Humano
(03-12-2021) De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la discapacidad es un término general que abarca las deficiencias, las limitaciones de la actividad y las restricciones de la participación de las personas; entendiendo las deficiencias como problemas que afectan a una estructura o función corporal; las limitaciones de la actividad como dificultades para ejecutar acciones o tareas y las restricciones de la participación relacionadas a problemas para participar en situaciones vitales.
Por lo tanto, la discapacidad es un fenómeno complejo que refleja la interacción entre las características del organismo humano y las características de la sociedad en la que vive.
Cada 3 de diciembre -desde 1992- se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una iniciativa de la UNESCO para promover el respeto, la inclusión e igualdad de oportunidades para las personas discapacitadas, a fin de garantizar sus derechos y bienestar.
Existen muchos tipos de discapacidad. Las más frecuentes son la física, sensorial -auditiva o visual-, intelectual y la psíquica. Se estima que en América Latina viven cerca de 85 millones de personas con algún tipo de discapacidad que, además, son víctimas de exclusión y discriminación.
Vivir en Venezuela con discapacidad
Viajar en el metro, usar el transporte público, trasladarse por las aceras o ir a un centro comercial, puede resultar una tarea difícil para una persona con discapacidad física en Venezuela. Las vías de acceso o de tránsito no están adaptadas para alguien que se movilice en silla de ruedas, por ejemplo. Esto se corresponde a una violación de los derechos humanos de las personas con discapacidad.
En el mes de agosto, a través de redes sociales, se conoció la historia de Kelly Ayary. La joven que se moviliza en silla de ruedas, denunció que le impidieron la entrada a una tienda de ropa ubicada en el Centro Comercial Propatria de Caracas.
“Yo iba a entrar a comprar y me corrieron porque no se puede entrar en silla de ruedas. Las personas en silla de ruedas no pueden entrar a Balú”, denunció Kelly en un video que compartió en las redes.
Aunque la empresa emitió un comunicado ofreciendo disculpas y rechazando cualquier acto de discriminación; esta es una realidad a la que se enfrentan cada día las personas con discapacidad ante la falta de políticas inclusivas por parte del Estado.
Uno de los puntos en los que existe una mayor deuda del Estado venezolano con las personas con discapacidad es en el ámbito educativo.
En Venezuela es muy difícil que una persona con discapacidad que ingrese a una escuela especial, pueda tener prosecución académica real, efectiva y tangible. No hay una adaptación curricular para la atención educativa de personas con discapacidad ni infraestructura adecuada.
En el año 2013, Venezuela suscribió y ratificó la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad que, en su artículo 9, dispone la aplicación e implementación de medidas que aseguren la accesibilidad de las instalaciones y los servicios abiertos al público o de uso público de las personas con discapacidad. No se ha cumplido, y la Ley Orgánica para la Protección de Personas con Discapacidad es letra muerta.
“Limite Cero”
A pesar de todas estas limitaciones, hay quienes, en medio de las dificultades, cada día luchan para cumplir sus sueños en un país donde la empatía y la inclusión no son una constante.
Lawrence Parra tiene 25 años, nació con Parálisis Cerebral Diplejía Espástica o, como se conoce en la actualidad, Insuficiencia Motora de Origen Central (IMOC), una discapacidad neurológica de corte psicomotora donde las neuronas que reconocen el sistema locomotor no funcionan de manera adecuada o no existen.
Esta condición afectó su motricidad gruesa, es decir, las piernas; mientras que, su motricidad fina es regular al igual que su capacidad intelectual y cognitiva.
“Esto es muy importante destacarlo, porque muchas condiciones de vida son consideradas discapacidad, pero, hay muchos estigmas respecto a las personas con discapacidad; a lo que puede o no hacer, a que, si realmente se pueden integrar al ámbito laboral o tener una vida plena en todos los sentidos”, señala Lawrence.
Lawrence Parra, es periodista y ha hecho de su discapacidad una oportunidad para informar y formar a otras personas. Es productor y conductor del programa “Limite Cero”, un espacio televisivo y radial que busca educar sobre las distintas discapacidades, además, de promover una inclusión no forzada.
“Es un programa diseñado para demostrar que la discapacidad es simplemente un estilo de vida diferente”, destaca.
Se debe romper con todos los paradigmas y tabúes que hay en torno a la discapacidad, “es tabú, por ejemplo, hablar de sexualidad y discapacidad. Hay muchos mitos en torno a las condiciones de vida consideradas discapacidad que hay que romper, comenzando por el esquema de vulnerabilidad con el que generalmente son vistas las personas con discapacidad por la sociedad”.
Hay miles de campañas, de grupos en redes sociales, cadenas en las que se pide integrar a las personas con discapacidad, que no hay que discriminarlas, que hay que quererlas, abrazarlas porque son ángeles, porque vienen a enseñarnos, a educarnos, a hacer muchas cosas; pero son eso, simples campañas mediáticas que no contribuyen en nada, enfatizó.
“Nadie establece la factibilidad de la inclusión, es decir, porqué hay que incluirlos, porqué es factible, por qué es posible que se dé la inclusión y de qué manera. Nadie explica la manera y es ahí donde se debe hacer énfasis”, aseguró Lawrence, agregando que no ha habido en Latinoamérica un programa serio en donde se demuestre y se hagan las adaptaciones para que realmente la inclusión sea efectiva.
Las personas con discapacidad son usadas como fachada
Cada vez son más las empresas, instituciones u organizaciones que presumen de ser inclusivas por contar en sus nóminas con una o más personas que presenten algún tipo de condición o discapacidad. Una inclusión casi obligada para cumplir con la ley; sin embargo, a juicio de Lawrence Parra, esto es solo una fachada.
“No es inclusión que haya una persona con discapacidad contratada. A esa persona la limitan, no hace nada, no aporta nada, porque simplemente la tienen como una fachada para decir que son inclusivos o porque así lo exige la ley, y resulta que no, las personas con discapacidad pueden ser productivas y proactivas, simplemente hay que descubrir la manera en cómo lo pueden hacer. Eso es parte de lo que hago en mi programa”.
“Todos tenemos derecho a sentirnos productivos en cualquier cosa, así sea en lo más mínimo. Hay que buscar las potencialidades de las personas con discapacidad para ver en qué área se puede desarrollar y ser competente al igual que el resto de su entorno”, finalizó.
El día internacional de las personas con discapacidad nos debe llamar a la reflexión como sociedad y, sobre todo a los gobernantes, quienes tienen el poder de construir las bases de una sociedad verdaderamente inclusiva, y entender que, si realmente quieren legislar desde la inclusión, deben pensar en cómo lograr que una persona con discapacidad haga su vida independiente, sin depender de nadie y gozando del mismo respeto y los mismos derechos de las demás personas.
Es importante que prevalezcan los valores de equidad, como una manera de establecer justicia y poder así construir una verdadera inclusión de las personas con discapacidad a nivel educativo, laboral, de acceso a la salud, al deporte y -sobre todo, a nivel social.