En el año 2019, la Encuesta Nacional de Hospitales estimó un promedio de 38 camas operativas por hospital, luego en 2020 y 2021 se redujo a 35 camas por hospital. Y para inicios del 2022 el promedio se incrementó a 38 camas de emergencia disponibles por hospital.
(16-05-2022). Ha pasado más de un mes desde que comenzó “la tortura” de Guaiquira Gómez y su mamá, Noris Indriago, dentro del sistema de salud publica de Venezuela. Según los testigos, a la señora de 63 años de edad la atropellaron tres motorizados el 7 de abril, en la avenida Tamanaco de El Rosal.
“El primer motorizado, según el testimonio de las personas, era de una empresa de servicio de delivery muy reconocida. Y los otros dos fueron porque no les dio tiempo de frenar y la golpearon en la cabeza. Ahí empezó nuestro calvario”, relató Guaiquira.
Luego del accidente, una comisión de funcionarios de la Policía del municipio Chacao e integrantes de la Brigada de Paramédicos Viales, conocidos como Ángeles de la Autopista, trasladaron a Noris a la sede de Salud Chacao, donde recibió los primeros auxilios.
Luego fue remitida al Hospital Dr. Domingo Luciani, en el municipio Sucre, pero inicialmente los médicos del área de trauma shock se negaban a recibir a Noris porque era el cambio de guardia. Guaiquira atribuye la decisión de finalmente recibir a su mamá a que los médicos y enfermeras vieron el carnet que colgaba sobre su cuello, que la acredita como funcionaria pública. Pero solo procedieron a practicarle los exámenes más urgentes, los cuales determinaron que Noris presentaba fractura en una de sus piernas.
El diagnóstico final fue que Noris, quien es hipertensa, necesitaba ser operada. Sin embargo, a las 6:00 p. m. a Guaiquira y a su mamá las mandaron a desalojar el hospital: no había insumos ni un quirófano para practicar la cirugía. Solo les dieron una “referencia abierta”, que explicaba su patología, y según permitiría que Noris fuese recibida en cualquier hospital.
Esa noche a Guaiquira no le quedó otra opción que llevarse a su mamá a la casa. Improvisaron curas para los golpes que tenía la señora en el cuerpo, pero no había ninguna manera de tratar la fractura en la pierna, la cual se veía “como si estuviera suelta”. Ambas se sentían “a la buena de Dios”.
Viacrucis por los hospitales
Al día siguiente Guaiquira, con ayuda de otros familiares, empezó la búsqueda de algún hospital que pudiera recibir a su mamá. El primero que visitó fue el Hospital Dr. Jesús Yerena, conocido como Hospital de Lídice. Allí la respuesta fue: “Los aires acondicionados de los quirófanos están dañados y no hay camas disponibles para hospitalización”.
Luego fueron al Hospital Militar Dr. Carlos Arvelo y la respuesta tampoco fue positiva. Hubo muchas excusas y un trabajador del centro médico le confesó a Guaiquira que “sin palanca” no había manera de que ingresaran a Noris.
“Mire, señora, si usted aquí no conoce a un coronel o a un militar de un rango alto, aquí no se le van a recibir”, fueron las palabras del funcionario.
La última opción de ese recorrido fue el recién bautizado Hospital Universitario Periférico Dr. Miguel Ángel Rangel, conocido como Periférico de Coche. Allí tampoco recibieron a Noris, por las mismas razones: no hay camas disponibles y no hay quirófanos activos.
Guaiquira pensó que el hospital de Coche sería la diferencia porque en 2020 este centro médico fue reinaugurado con cinco quirófanos totalmente nuevos, según reseñó Venezolana de Televisión el 16 de junio de 2020. Los tres hospitales que ella visitó con su madre están ubicados en el municipio Libertador de Caracas, al oeste de la ciudad.
Atención hospitalaria depende de contactos
En el 2019 la Encuesta Nacional de Hospitales (ENH), que realiza la ONG Médicos por la Salud, estimó un promedio de 38 camas operativas por hospital. Luego, en 2020 y 2021, se redujo a 35 camas por hospital. Sin embargo, a inicios del 2022 el promedio se incrementó a 38 camas de emergencia disponibles por hospital.
La ENH explicó que las razones de por qué varía la existencia de camas en las emergencia pueden ser varias:
- Malas condiciones de la camilla.
- Falta de personal o insumos para poder atender al paciente.
- Falta de espacio físico.
“Por ejemplo, si alguna zona de la emergencia tuvo que ser cerrada por una filtración u otro problema de infraestructura, esto puede influir en la cantidad de camas que pueden ser usadas en un espacio ahora reducido”, indicó el boletín de abril.
Julio Castro, médico internista infectólogo, explicó a Crónica.Uno que este dato es un promedio nacional que no se puede contextualizar a un hospital en específico. “Eso nos ayuda a ver el seguimiento a través del tiempo del mismo índice. Cada hospital tiene una realidad particular con base en la realidad geográfica de cada sitio”.
Tras cinco horas de ruleteo por los hospitales, con su madre en el vehículo, un conocido de Guaiquira la ayudó para que ingresaran a Noris en el Hospital Victorino Santaella, en Los Teques, estado Miranda, a 30 kilómetros de Caracas. Después de los trámites burocráticos y de la ayuda del contacto, finalmente la recibieron en dicho centro de salud el viernes 8 de abril.
«Los procesos han sido lentos, todo allí es restringido. No hay ciertos insumos ni cómo practicar la mayoría de los exámenes a mi mamá”, dijo.
A pesar de que su mamá es atendida dentro del sistema de salud pública venezolano, un organismo dependiente del Gobierno, Guaiquira calculó que ha gastado, junto con su hermana, más de 500 dólares. Esto es lo equivalente a 2355 bolívares, más de 16 salarios mínimos en Venezuela,
«Nosotras tenemos que llevar hasta el agua, porque el hospital tiene deficiencias en el servicio. La comida también la llevamos porque ellos algunas veces dan y otras no, pero nosotras llevamos todo”.
La ENH estimó que en el año 2019, 6 % de los hospitales reportaron no tener suministro de agua y 21 % registró intermitencia en el servicio. Para mediados de marzo de 2022, 1,2 % de los hospitales reportó no haber tenido suministro de agua ningún día y 21 % reportó intermitencia.
Hospitales con capacidad operativa de 10 %
Desde el 8 de abril, Guaiquira va casi todos los días desde Caracas hasta Los Teques, algunas veces en transporte público y otras la lleva su esposo en vehículo propio. Cuando no va ella, va su hermana. Entre ambas se turnan el cuidado de su mamá. La última noticia que recibieron es que la señora podría ser finalmente operada este domingo, 15 de mayo, luego de más de un mes espera.
La Federación Médica de Venezuela (FMV) estima que existen unos 301 centros de salud en el país. En rueda de prensa, el pasado 10 de marzo, Douglas León Natera, presidente de la FMV, aseguró que los hospitales del país funcionan al 10 % de su capacidad.
«Esto que estamos pasando no se lo deseo a nadie porque ha sido un suplicio”.
El ruleteo de la mamá de Marta
Marta* no tiene tiempo para responder los mensajes que están sin leer en su teléfono celular. Está la mayor parte del día en el hospital al cuidado de Carmen*, su mamá, quien tuvo un accidente el pasado 11 de abril.
La señora, de 55 años de edad, se resbaló mientras caminaba por la avenida Libertador y se golpeó el hombro y uno de los pies. Estos impactos le provocaron cuatro fracturas a nivel del pie y una en el húmero.
A Carmen la socorrieron algunos testigos, hasta que lograron contactar a su hija Marta. De ahí, la señora, quien es asmática y con un reciente diagnóstico de prediabetes, fue trasladada al Hospital José María Vargas, en la parroquia San José. Sin embargo, no la atendieron y a pesar de que contaban con el servicio de traumatología, no tenían con qué hacerle tomas de rayos X.
«Uno de los médicos nos dijo que era necesario trasladarla a un centro de salud con mejores condiciones ya que necesitaba ser operada y allí no estaban realizando intervenciones quirúrgicas”, expresó Marta.
Luego Marta trasladó a su mamá al Hospital Periférico de Catia. Al entrar Carmen se percató de que dicho centro de salud se encuentra en trabajos de remodelación y que el servicio de traumatología está totalmente cerrado.
«Allí solo le inmovilizaron el pie y le colocaron una férula. También nos ofrecieron la opción de remitirla a un hospital en La Guaira, donde presuntamente podían operar a mi mamá. Eso fue lo que nos ofreció la persona que está encargada del servicio de traumatología en ese hospital”.
Esa opción no convenció a Marta, por lo que decidió intentarlo en el Hospital Dr. Jesús Yerena, donde tras cuatro horas de espera le otorgaron el ingreso a Carmen. Debido a una complicación de las fracturas, los médicos decidieron dejar a Carmen hospitalizada. El pasado 11 de mayo Carmen cumplió un mes de hospitalización.
Desde que Carmen está hospitalizada, el centro de salud solo ha aportado algunos medicamentos, como antibióticos y anticoagulantes. De resto, todo debe costearlo Marta, quien ha recibido la ayuda de familiares y amigos.
Marta calculó que, al igual que Guaiquira, ha tenido que gastar más de 500 dólares para costear la compra de medicamentos, insumos y exámenes para su mamá, a pesar de estar hospitalizada en un centro de salud pública.
En su boletín de febrero, la ENH determinó 44 % de desabastecimiento de insumos de emergencia. En sus estimaciones, la ENH tomó en cuenta 20 insumos considerados como indispensables, siendo el oxígeno el que menos presentó escasez a escala nacional (6 %), y los antihipertensivos los que más fallas presentaron (37 %).
Marta acude al centro de salud en transporte público, algunas veces en carro particular. Las comidas de Carmen las preparan en casa y se las llevan, porque aunque este centro de salud sí tiene comidas fijas en el día, las comidas que preparan “no son balanceadas”.
Carmen también sigue en espera de ser operada. En principio tenía heridas abiertas en la pierna, y por eso no fue intervenida al momento del ingreso. Después los médicos pidieron evaluaciones de otros especialistas, específicamente de endocrinología y neumonología, que ambos en este momento no tiene el hospital.
Según la ENH, durante el año 2020 hubo un promedio de 13 médicos en el turno diurno, mientras que para el 2022 registró un promedio de 12, y en el turno nocturno es de 10 (residentes y especialistas) por hospital.