Representantes de empresas privadas y públicas se unieron para rehabilitar los espacios del Periférico de Pariata en el litoral varguense. La idea es inaugurar dos salas de quirófano y remodelar otras área del hospital
«Es bonito ver cómo un sector que lo está pasando mal y al que le vienen tiempos muy difíciles decide actuar a pesar de la crisis”. Así lo dijo Lenín Sarro, cirujano y subdirector del hospital, mientras recorría uno de los pasillos ahora iluminados en el Hospital Rafael Medina Jiménez, mejor conocido como Periférico de Pariata, en el estado Vargas.
La pandemia por covid-19 llegó a Venezuela en marzo de 2020 y el hospital ha sido uno de los centros de salud designados para recibir pacientes con esta enfermedad.
Diariamente, las personas esperan en las afueras con comida, agua y ropa para los pacientes hospitalizados por coronavirus, sin mencionar los que asisten para ser atendidos por otras patologías. Esta realidad se replica cada día y de ahí nació la necesidad de apaciguar las carencias que afectan al hospital.
Quienes recorren los pisos del hospital, murmuran que algo ha cambiado en las escaleras. Lo mismo sucede en el recibidor del hospital. El proyecto, que comenzó cambiando y arreglando pequeñas cosas, ya tiene muchos méritos, pero esperan que el mayor de ellos es que pueda ser replicado en otras sedes de la región.
Una alianza hospitalaria
Empresas privadas y el Estado se propusieron arrancar conjuntamente la restauración del centro médico con la idea de restaurar y remodelar uno de los hospitales de referencia en el litoral venezolano.
Otra de las personas que hizo posible la restauración de muchas salas del hospital fue Jesús Naranjo, creador y coordinador del Proyecto Yanomami. Actualmente no solo está implicado en esta causa como parte del equipo que supervisa los avances del hospital, sino que también se ha convertido en uno de los enlaces entre los diferentes proyectos que ayudan a materializar el objetivo que es inaugurar el piso cinco: el quirófano.
Este proyecto tiene como objetivo rehabilitar y reestructurar dos salas de quirófano que no prestan servicio desde hace cuatro años, además de otros espacios del hospital. La idea, explica Naranjo para El Diario, es que una vez esté remodelado en su totalidad, pueda ofrecer más opciones al varguense y convertir este sitio en un logro de referencia entre el sector privado y el Estado.
Por su parte, el doctor Lenín tuvo la oportunidad de conocer a representantes de empresas, quienes estaban dispuestos a iniciar el proyecto. Meses después, ya se tenía un plan de acción. La iniciativa, comenta, también consiste en restaurar los espacios hospitalarios de la región que se encuentran golpeados por la crisis humanitaria del país.
Este proyecto surge para contribuir y regresar un poco de esperanza e ilusión al personal que ahí trabaja. Para los internos de pregrado, los médicos residentes y especialistas que exigen tener las mínimas condiciones para atender a los pacientes.
«Esta alianza es para mejorar la atención al público de más de 300 personas que llegan al hospital todos los días. Desde hace dos meses, hemos hecho un equipo en pro de la apertura del quirófano. Sabemos que es una experiencia nueva, pero queremos dar el ejemplo de que sí es posible la unión de la empresa privada y la pública en apoyo a la comunidad”, indicó el cirujano.
Ayudar al más necesitado
Los representantes que llevan esta iniciativa están conscientes de las dificultades que requiere llevar a cabo este trabajo, sobre todo, en tiempos de pandemia. Eso lo tiene clarísimo el doctor Pérez, pero el proyecto atrajo empresas que estaban dispuestas a apoyar y hacer crecer la idea.
Explica que colaboran estrechamente con organizaciones y empresas que les facilitan los materiales necesarios para la restauración del quirófano.
De hecho, las organizaciones crearon una red que implica a empresas, dueños de locales o proveedores con un objetivo común: habilitar el quirófano y capacitar con condiciones a los médicos y enfermeras que batallan contra el covid-19.
Naranjo, por su parte, se encarga de la supervisión y seguimiento del proyecto, motivado por los cambios que ya son visibles en el hospital. De pasillos oscuros, ahora recorre el Periferico buscando las maneras de atender las problemáticas dentro del mismo. Diariamente está en el hospital, pues está buscando sumar más esfuerzos y acelerar el proceso.
Asimismo, el proyecto cuenta con el apoyo de empresas y aliados de todos los sectores como Farmatodo, Metro Paint, Alfer, Triofoodccs, Impromotor, Grupo Industrial Douglas Shoes, Microtech, Toscana restaurante, Pop Radio y Proyecto Yanomami, organización que también brinda apoyo al hospital con comida e insumos para el personal médico.
Estiman que el quirófano pueda estar finalizado en un mes. Faltan trabajos de pintura y que sean trasladados los equipos médicos restantes y necesarios para las dos salas de operación. El doctor Lenín hace la invitación a las empresas que se quieran unir y participar en rehabilitación de otras partes del hospital. “Cualquier empresa puede unirse y ser parte de este proyecto. Es un esfuerzo de muchos para finalmente atender una de las principales carencias de este centro”, agregó.
El trabajo de todos ellos permite, aún en un país convulsionado como Venezuela, generar un sentido de comunidad y esfuerzos por la rehabilitación de los espacios hospitalarios. Y es que la inauguración del quirófano emociona a los trabajadores del Periférico de Pariata. Esperan que contribuya a su crecimiento y que permita ofrecer una opción a los varguenses para no tener que viajar hasta Caracas. Lo que comenzó como un pequeño granito de arena puesto por todas las organizaciones que hacen parte del proyecto, poco a poco se ha ido materializando para continuar con la idea de hacer un país mejor para todos.
