El alto costo de los alimentos contrasta con el bajo poder adquisitivo, el aumento de la inflación, la diferencia cambiaria y el estancamiento, desde hace más de dos años, del sueldo mínimo
(22-10-2024) Una familia venezolana conformada por 5 personas requiere de al menos 531,57 dólares para poder cubrir el costo de la canasta alimentaria.
Así lo denunció el Centro de Documentación y Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros (Cendas-FVM), en su monitoreo mensual, presentado el pasado lunes, 21 de octubre.
Este monto representa un verdadero desafío para la mayoría de las familias venezolanas que deben lidiar con el alto costo de los alimentos, los bajos salarios y la inflación.
Si se toma en cuenta el sueldo mínimo oficial que, desde marzo de 2022, se ubica en 130 bolívares (3,32 dólares a la tasa oficial del Banco Central de Venezuela del 21-10-2024), se necesitarían 160,11 sueldos mínimos para cubrir, solo, la canasta alimentaria.
De igual forma, una familia que perciba un ingreso mínimo integral (sueldo mínimo + bono de alimentación + bono de guerra económica), tampoco puede cubrir su alimentación de forma adecuada, pues estaría recibiendo un aproximado de 133,32 dólares y necesitaría 3,98 veces el mismo monto, para cubrir la canasta alimentaria.
De acuerdo con el Cendas-FVM, el sector con mayor aumento fue el de carnes y sus preparados (3,46 %), grasas y aceites (2,49 %), así como las raíces y tubérculos (1,94 %). En cuanto a educación, la organización reportó un aumento del 4,9 %.
La brecha cambiaria: el nuevo dolor de cabeza de las familias venezolanas
Debido al aumento del dólar, tanto en el mercado oficial como en el paralelo, los venezolanos han visto como sus ingresos se ven mermados.
Con la brecha cambiaria entre el dólar BCV y el paralelo, surgió una nueva modalidad de cobro en comercios «el dólar promedio».
Con casi 10 bolívares de diferencia entre el oficial (39,17 Bs.) y el paralelo (47,35 Bs.), lo que representa un 20,88 % de brecha cambiaria, a los venezolanos hoy se les suma un nuevo problema a su ya frágil economía.
Esta diferencia cambiaria, de acuerdo con especialistas como Luis Oliveros, economista y decano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Metropolitana, se debe a «la incapacidad del BCV para satisfacer la demanda de dólares».
Esta nueva modalidad de cobro, que está ganando terreno a pesar de la exigencia de usar la tasa BCV como referencia, hace que el dinero de los venezolanos rinda mucho menos y que, además, el precio de productos básicos como alimentos se incremente significativamente.
Que en el país no existan políticas económicas acertadas, lleva a que los derechos económicos y sociales sean vulnerados cada día.
Una familia promedio ya no puede cubrir su alimentación, ni su atención médica y, mucho menos, todo lo que se requiere para garantizar una educación óptima para niños, niñas adolescentes y jóvenes. La crisis económica en Venezuela se acentúa.
