Ni Corpoelec ni el Ministerio de Energía Eléctrica, dan respuesta a los usuarios sobre los constantes cortes de electricidad. En Mérida publicaron un Plan de Administración de Cargas (PAC) que no se cumple
Caleidoscopio Humano
(10-02-2024) En las primeras semanas del 2024, los cortes eléctricos se han incrementado de manera considerable -y alarmante- en Venezuela.
A través de redes sociales, los venezolanos denuncian las constantes y prolongadas fallas de electricidad que, además de dañar equipos electrodomésticos, impide la actividad comercial, académica e, incluso, pone en riesgo la vida de personas que, por su estado de salud, requieren, de manera constante, de equipos conectados al suministro eléctrico.
Edward Ocariz, quien forma parte del Comité de Defensa de los Derechos Humanos de la parroquia Coche, en Caracas, denunció que el 7 de febrero “a las 6:40 PM ocurrió el cuarto apagón en lo que va del día”, agregando que a las 9:47 PM, varios sectores de Coche seguían sin electricidad.
El 8 de febrero, usuarios de la red social X (antes Twitter), denunciaron que en el sector El Samán de Barcelona, estado Anzoátegui, tenían más de 10 horas sin electricidad.
“Por tercer día consecutivo sin electricidad desde las 11:00 a.m hasta las 5 p.m. En Juan José Mora es la cosa, furia de apagones diarios», denunció en X la usuaria María Alejandra Suárez Carpio, habitante del estado Carabobo.
En otros estados como Mérida, Zulia o Táchira, la situación no es distinta. En estas entidades del occidente de Venezuela, se reportan hasta cuatro cortes de electricidad al día que, sumados, llevan a más de 9 horas sin suministro eléctrico.
En Mérida, Corpoelec informó durante el mes de enero, un Plan de Administración de Cargas (PAC) con cortes eléctricos de 3 horas por sector. No se cumple.
En Cojedes, el Observatorio Ciudadano Monitor Luz de la Agencia Cojedeña de Investigación (ACI), registró 17.070 apagones, al menos 24.200 fluctuaciones de voltaje y 3.075 aparatos electrodomésticos dañados, durante el año 2023. Situación que, al inicio de este año, se ha intensificado.
La falta de electricidad no solo es una vulneración al derecho de las personas a tener una vida digna, también vulnera los derechos económicos porque, al irse la electricidad, la conectividad de puntos de venta o el uso de plataformas de pagos se limita, afectando la actividad económica, los derechos sociales, pues se ve afectado el derecho a la salud y a la educación, y los derechos ambientales y culturales, pues se limitan las horas de entretenimiento, esparcimiento y recreación de niños, niñas, adolescentes y personas en general.
El Estado está en la obligación de proponer políticas públicas y de disponer de los recursos necesarios para garantizarle a los venezolanos y venezolanas, una vida digna.